Capítulo 2 – Baby Mission

—¡Dime que dio positivo!— Ruega Yunho mientras esta recostado en la cama, cubriéndose con la manta su aparato reproductor.

—Tan solo espera, dice cinco minutos y recién pasaron…— mira su reloj —20 segundos

5 Minutos más tarde con un Yunho agotado y un Jaejoong que intenta hacer un hueco en el suelo de tanto ir y volver.

—¿Y…?— Pregunta Yunho viendo hacía la puerta del baño, sin divisar a Jaejoong.

—Negativo— Jaejoong sale del cuarto de baño y se sienta a un lado de Yunho mirándole con ojos de cachorro.

—Oh, no… no, no y no ¡Jaejoong, ya dos meses!— dice agotado mientras se sienta del otro lado de la cama —Renuncio.

—No, Yunho, por favor… te daré el doble de lo que te prometí así que… ¡Por favor!— dijo evitando de que Yunho saliera del departamento —¡Poooorfaaavoooor!— Hace un capricho como un niño, se cuelga de las piernas del más alto y sigue rogando y haciendo muchos pucheros.

—Es que… me quitas las energías, Jaejoong. Tener relaciones todos los días, a toda hora, en cualquier momento no es la solución.

—No lo llames tener relaciones por eso le di un nombre ¡Mission Baby!— Suspira —Y tampoco lo digas de esa manera suena como si no disfrutaras lo que haces.

—De hecho, nunca lo había hecho con un chico y lo intenté porque eres lindo, pero… creo que es suficiente y completamente difícil.— Dice agotando su paciencia mientras toma el pomo de la puerta de salida.

—Eres… eres…  malo… conmigo— volteo y vio que Jaejoong había empezado a llorar —N… no m… me qui… quieres ayudar Buuu— Su llanto aumenta —Solo… solo quiero un bebé ¿Es... tan difícil?

—Oye, Jae… no llores. Está bien, te ayudaré, pero el doble de lo que me prometiste, eh.

—Sí, muchas gracias— Jaejoong se para y sonríe como si esas lagrimas jamás hubieran estado ahí, Jaejoong piensa que haber tomado clases de teatro le está sirviendo mucho.

—Hey, ¿Qué paso con tu terrible llanto?

—Ah, se fue a dar un lindo paseo. Entonces… ¿Intentamos nuevamente?— Sonríe y hace la cara más tierna posible.

—Que más da, de todos modos ni quería irme— rebuzna y camina con Jaejoong a la habitación dónde vuelven a intentar una, y otra y otra vez.

Aunque Jaejoong sea muy optimista, está perdiendo las esperanzas, mira el calendario y lo hace todos los días en los cuales receto su ginecóloga. Aunque cuando estaba en sus días, no era como normalmente lo está una mujer, los hombres ni siquiera sangraban o algo por el estilo, solo tenían un dolor completamente fuera de lo común, pues su cuerpo nunca estuvo preparado para esos cambios que ahora tenían, y no todos los hombres tenían estos cambios, nadie sabía porque eran unos de tantos pero la gente se acostumbró y ya no era extraño ver esos casos y menos ver hombres embarazados, era completamente normal.

—¿¡Podrías dejar de hacer tanto ruido!?

Y si, ahora Jaejoong estaba en unos de esos días y le molestaba completamente todo, aunque ese dolor no se aliviaba solo intentaba concentrarse pues ya se había tomado una pastilla para los dolores menstruales.

—Yo no sé qué hago aquí— cuestiona Yunho —El contrato dice que debo estar solo los nueve meses y aun no estas embarazado.

—¡Es tu culpa! Seguro es porque tu esperma esta defectuoso

—Oye, no te metas con mis renacuajos… no están defectuosos, el defectuoso debes ser tu

—¿Yo…?— Pregunta Jaejoong, Yunho esperaba un golpe y listo, pero no fue así, mira dónde estaba Jaejoong el cual estaba llorando —E…eres cruel… ¿Por qué dices esas cosas que duelen?— hipaba en cada oración haciéndole completamente inentendible.

—Está bien, lo siento.

Pero por suerte esos cambios hormonales no duraban muchos días sino horas o a veces un día medio y listo, luego volvía a ser todo normal hasta el mismo día del mes siguiente, sin importar nada.

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—Dime Jaejoong ¿Cómo te has sentido?

—Bien, pero no logro embarazarme, no sé qué hacer…

—Bueno no te desanimes— menciona la doctora, Shin Hye. —A veces las pruebas caseras dan negativo y son muchas las razones, una es porque verdaderamente no estas embarazado o porque están falladas. Así que ¿Qué te parece si te hacemos una prueba acá?

—Sería genial, por favor ¿Qué debo hacer?

—Bueno, haremos dos pruebas: la de sangre, la de orín y luego de quince minutos estarán listas, así que ¿Qué esperas? Vamos— sonríe y lo guía hasta un consultorio, le hace las pruebas y lleva los recipientes al laboratorio para examinarlos. Vuelve a dónde está Jaejoong y nota al chico muy nervioso —Espero que hayas conseguido a un buen socio, Jaejoong, y que no tenga adicciones o algo así…

—¿Si es así mi hijo saldrá adicto?

—Claro que no, Jaejoong, en ese caso es que si tú las consumes le hará mal al bebé y luego se hará dependiente de eso que estaba en tu cuerpo y si no tiene, puede enfermarse gravemente.

—Gracias, eres muy amable, noona y espero que sí, que si este embarazado porque si no todo ese maldito esfuerzo será en vano.

—Bueno, tú no pareces agotarte, pero ese socio tuyo, cuando te hice una visita el otro día parecía papilla en el suelo.

—Lo sé, por eso espero a lograr lo prometido para pagarle y que se tome las vacaciones que necesita— ríe y se acomoda mejor en el asiento.

—Dime ¿puedo saber la razón por la cual está presente esa sonrisa y ese brillo en tus ojos cada vez que nombras a Yunho?

—Ah, N... no es nada, te lo aseguro— tartamudeo —de hecho ambos prometimos no sentir nada por el contrario, te aseguro que no me enamoraré de él… ¡Lo prometo!— sonrió algo triste, porque no sabe qué es ese mar de emociones y sensaciones cuando está con el castaño oscuro, pero sabe que no es amor, es obvio que no lo es porque él se prometió no enamorarse y nunca lo hará o bueno, solo cuando llegue el indicado y los hombres dejen de huir de él y de su extrema belleza.