Capítulo 6 - SMB

Las manos de Jaejoong temblaban de la emoción. Vagaba alrededor del apartamento, arreglando y volviendo a arreglar los cojines en el sofá, encendiendo las velas, ajustando el mantel. Heechul iría a cenar. Siwon también estaría. Jaejoong quería que todo estuviera perfecto cuando los presentara.

No estaba seguro de cómo Heechul podría reaccionar al estilo de vida de Siwon, pero Heechul tenía los mismos deseos que Jaejoong, quizás incluso más. Jaejoong estaba muy seguro de que a Heechul podría gustarle mucho Siwon. Y estaba seguro que a Siwon podría gustarle Heechul.

—Bebé, cuántas veces vas a limpiar esa maldita mesa,— Yunho dijo mientras entraba a la sala —.Vas a terminar quitándole la pintura.

Jaejoong giró los ojos. Yunho envolvió sus brazos alrededor de Jaejoong y Jaejoong suspiró. Apoyó su cuerpo contra el de Yunho, inclinando la cabeza para un rápido beso. —Solo quiero que las cosas estén perfectas,— dijo un momento después —.Es la primera vez desde que me mudé que tendremos invitados a cenar.

—Jaejoong, todo está bien. Además, una vez que Siwon conozca a Heechul, no creo que les importe cómo se vea el apartamento.— Yunho se rió —.Creo que va a estar muy ocupado viendo cada movimiento de Heechul. Es una cosita linda.

—¡Hey! No pienses en Heechul en términos sexuales,— le dijo girándose en los brazos de Yunho —.Soy el único del que puedes pensar de esa forma.

—No te preocupes, bebé. Heechul no me interesa en lo más mínimo.— Yunho bajó la cabeza y frotó su nariz contra la de Jaejoong —.Solo tengo ojos para ti.

—Es lo mejor.— Jaejoong se rió —.Porque si no lo haces, tendrías...

El sonido del timbre interrumpió el resto de las palabras de Jaejoong. Jaejoong dejó su cabeza caer contra el pecho de Yunho. Tomó una profunda respiración, amaba el aroma que se arremolinaba alrededor de él… hombre, jabón y deseo. ¡Yum!

El timbre sonó de nuevo. Jaejoong liberó a Yunho con un gruñido y fue a abrir. Abrió la puerta, sonriendo cuando vio a Siwon parado ahí. —Hey, Siwon, entra.

—Hola, Jaejoong. Espero no haber llegado demasiado temprano,— dijo Siwon. Entrando al apartamento y dándole su chaqueta a Jaejoong.

—Oh, no, Heechul aún no ha llegado,— contestó Jaejoong. Cerró la puerta y colgó la chaqueta de Siwon en el armario —.Lo más probable es que llegue tarde. No creo que Heechul llegue a tiempo a ningún lado.

—Eso no es un incentivo, Jaejoong,— Siwon amonestó —.Llegar siempre tarde, es solo malos modales.

—¿Y? Si te relacionas con Heechul de la manera que creo que puedes, estoy seguro que podrás entrenarlo para que no lo haga.

Siwon levantó una ceja. Jaejoong le dio una nerviosa mirada, pero se forzó a mantener la calma. La única persona a la que tenía que responder era a Yunho. Siwon no era su dueño.

Se encogió de hombros. —¿Puedo ofrecerte algo de beber?

Siwon sonrió. —Sí. Un té sería maravilloso, Jaejoong.

—¿Té?— Jaejoong preguntó sorprendido —.¿En serio? Siwon ¿bebes té?— podría imaginarlo bebiendo whiskey.

—No bebo alcohol. Uno tiende a perder el control cuando el alcohol está involucrado.

—Oh,— replicó Jaejoong —.Supongo que eso tiene sentido. Bien, entonces té. ¿Algún sabor en particular?

—Earl Grey. Si tienes, por favor.

Jaejoong asintió y fue a la cocina. Siwon era tan cortés. Seguro que eso iba a chocar contra Heechul. Oh, Heechul podría ser cortés cuando era necesario, pero usualmente solo dejaba que por su boca saliera cualquier cosa que pasaba por su cabeza. Y eso podría chocar contra Siwon.

Jaejoong no podía esperar a verlos juntos. Los fuegos artificiales serían dignos de verse. Jaejoong conocía a Heechul el tiempo suficiente para saber qué tipo de hombre encontraba atractivo. Siwon era todo lo que Heechul anhelaba. Siwon parecía querer a alguien solo para él. Jaejoong cruzó sus dedos esperanzado.

Un momento después, regresó a la sala y colocó una pequeña bandeja frente a Siwon. —No estaba seguro si querías azúcar o miel, así que traje ambas,— le explicó, señalando la bandeja.

—Cualquiera estaría bien, Jaejoong. Gracias.

¡Tan malditamente cortés! Jaejoong se rió y se sentó en el suelo entre las piernas de Yunho. Rápidamente había aprendido que ese era su lugar favorito para sentarse. Bueno, sentarse en el regazo desnudo de Yunho era su favorito. Este era su segundo favorito.

Las piernas de Yunho lo rodeaban a cada lado. Los dedos de Yunho suavemente acariciaban el cabello de Jaejoong. Jaejoong se recargó, disfrutando la sensación del pene de Yunho presionándose entre sus omoplatos. Ah, el cielo.

En las noches cuando se acurrucaban de esa forma, Jaejoong a menudo se giraba y amaba a Yunho con su boca. Sentía un poco de lástima no poder hacer eso en este particular momento. Quizás después esa noche, después de que las visitas se fueran.

—Estoy impresionado con tu entrenamiento, Yunho. Jaejoong ni siquiera dudó en sentarse a tus pies.

Jaejoong sintió una pequeña caricia en un lado de su cara. —El entrenamiento no tiene nada que ver con esto, Siwon. Jaejoong siempre se sienta dónde quiere. Eligió sentarse ahí.

—¿Eso es cierto, Jaejoong?— Siwon le preguntó.

Asintió. —Me gusta estar aquí.

—¿Puedo preguntar por qué?

—No lo sé exactamente. Supongo que me gusta sentarme lo más cerca de Yunho que pueda sin estar encima de él. De esta manera me rodea totalmente.

Siwon sonrió. —Buena respuesta.

—Sí, estoy de acuerdo.— Dijo Yunho —.Lo recompensaré más tarde.

Jaejoong resplandeció. Estaba muy a favor de las recompensas. Yunho solía recompensar a Jaejoong cuando hacía algo muy, pero que muy bien. Esas recompensas venían en muy diferentes formas. Algunas veces Yunho palmeaba el trasero de Jaejoong. Otras veces dejaba que Jaejoong escogiera su juguete favorito y lo torturaba con eso.

Aun así, la recompensa favorita de Jaejoong era cuando Yunho dejaba que lo jodiera. Jaejoong tenía que ser excepcionalmente bueno para ganarse esa recompensa en particular. Con la pintura corporal de chocolate se había ganado dos noches de joder a Yunho. Jaejoong sonrió traviesamente. Recientemente había encontrado una pastilla de jabón de chocolate.

—Cuéntame más cosas sobre Heenim,— dijo Siwon.

—Yo solo lo he visto en un par de ocasiones,— Yunho contestó —,pero fue el compañero de cuarto de Jaejoong hasta que se mudó aquí. Si quieres saber más acerca de él, debes de preguntarle a Jaejoong.

—¿Jaejoong?

—¿Qué es lo que quieres saber?— le preguntó.

—¿Heenim tiene tus intereses únicos?

Jaejoong juntó las cejas, confundido. —¿Huh?

—Creo que Siwon quiere saber si Heechul puede disfrutar sentándose a sus pies tanto como tú disfrutas sentándote en los míos,— Yunho intervino.

—Oh,— Jaejoong dijo, asintiendo —.Sí, mucho más. Quiero decir, Heechul está un poco más dentro… um… bueno… él…— Jaejoong tartamudeaba.

—Creo que lo que Jaejoong está tratando de decir es que Heechul está un poco más dentro de este estilo de vida de lo que él está,— dijo Yunho —.De lo que he entendido de Jaejoong, Heechul prefiere el estilo de vida D/s y todo lo que conlleva.

Jaejoong asintió. Sí, Heechul prefería las cosas más intensas de lo que prefería Jaejoong. Jaejoong amaba su vida con Yunho. Amaba ser amado y cuidado por Yunho. Pero no estaba interesado en ser amarrado a una pared o caminar con una correa. Al menos, aun no.

—Lo dices.— Siwon se rió, pero Jaejoong podía oír el interés en su voz.

—Heechul es…— Jaejoong comenzó.

El timbre de la puerta.

—Aparentemente aquí está.— Yunho se rió. Palmeó el hombro de Jaejoong —.Ve a abrir la puerta, bebé, y deja entrar a tu amigo.

Jaejoong se puso de pie y fue a abrir la puerta, La sonrisa se cayó de sus labios cuando vio a Heechul. Su amigo no parecía feliz de estar aquí. De hecho se veía frenético. Su cabello estaba hecho un lío y su cara pálida.

—¿Heechul? ¿Qué sucede?— Jaejoong preguntó, guiando a Heechul al interior.

—Oh, cariño, lo siento tanto,— Heechul dijo rápidamente, tomando la mano de Jaejoong —.Tu padre está en la ciudad. Vino al apartamento. Le dije que no sabía dónde estabas, pero creo que me siguió.

—¿Mi padre?— Jaejoong preguntó. ¿Qué infiernos quiere su padre? Lo había desheredado hacía casi dos años. Jaejoong no había oído ni una palabra desde que su familia lo echó de su casa.

—Oh, Jaejoong,— dijo Heechul —.Lo siento tanto.

—¿Jaejoong?

Jaejoong se giró a ver a Yunho parado al lado de él. Solo parpadeó, confundido.

—¿Bebé? ¿Estás bien?— Yunho preguntó. Envolvió sus brazos a su alrededor, poniéndolo más cerca de su pecho —.¿Qué sucede, Jaejoong?

—Su padre está en la ciudad, Yunho,— Heechul explicó.

—¿Y?

Heechul sacudió su cabeza. —Si su padre está en la ciudad, eso es malo.

Yunho tomó el mentón de Jaejoong y levantó su cara. —Jaejoong, no tienes que ver a tu padre si no quieres. Es tu elección, pero no permitiré que te lastime.

—No sé por qué quiere verme después de todo este tiempo. Me odiaba y todo acerca de mí,— Jaejoong dijo tranquilamente —.Todos ellos lo hacen.

—¿Quiénes son todos ellos, Jaejoong?— Heechul preguntó, palmeando el brazo de Jaejoong —.Nosotros te amamos y todos esos no importan.

—Una muy astuta observación, Heenim,— Siwon dijo mientras se acercaba y le ofrecía la mano a Heechul —.Choi Siwon, a tu servicio. Es un placer conocerte.

Jaejoong levantó la cabeza del pecho de Yunho para ver a Siwon en shock. ¿Choi Siwon? Ese es un nombre bastante ejemplar. Jaejoong ni siquiera sabía que Siwon era chino.

—Yo… uh… Heechul, por favor,— Heechul contestó, estrechando la mano de Siwon —.Dios, ¡eres caliente! Tienes novio porque tengo que decirte que estoy interesado si estás soltero.

Jaejoong giró los ojos cuando la cara de Siwon se puso roja. «Aquí vamos», pensó.

Yunho cubrió su boca para evitar que se riera cuando Heechul hizo otro comentario fuera de lugar acerca de la sexy apariencia de Siwon. Una mirada a la cara de Siwon y Yunho sabía que su amigo no tenía ni idea de cómo tratar con Heechul.

Las bromas siguieron durante dos horas, desde que Siwon se presentó a Heechul. Siwon seguía tratando de mantener una conversación cortés con Heechul y Heechul seguía metiendo la pata cada vez que hablaba. Eso era maravilloso de ver.

Yunho se sentía muy seguro de que Heechul se iría a casa con Siwon esa noche. Siwon no podía alejar sus ojos de Heechul, justo como Yunho había predicho. Deseaba poder ser un observador, no notado cuando Siwon y Heechul finalmente comenzaran a ser íntimos. Seguro que eso sería interesante.

—¿No estás de acuerdo, Yunho?

—¿Huh?— Yunho preguntó cuando se dio cuenta que SiwonDante había dicho algo —.Lo siento. No oí lo que decías.

—Le estaba diciendo a Heenim aquí que la obediencia es el centro de cualquier buena relación. Si Jaejoong tiene el concepto de obediencia, todo lo demás puede adquirirse con el entrenamiento. ¿Estás de acuerdo?— Siwon le preguntó.

Yunho pensó en eso, entonces sacudió la cabeza. —No, el amor y la confianza deben de ser el concepto central. La obediencia puede ser buena, pero si Jaejoong no me amara o confiara en mí, nunca sería capaz de realmente someterse a mí. La obediencia es un derivado.

—Mi error,— dijo Siwon, inclinando la cabeza hacia Yunho —.Una relación exitosa debe de estar fundada en el amor y la confianza, asumí que era un punto que estaba dado.

—Bien, asumiendo que el amor y la confianza están dadas, entonces sí, la obediencia es el siguiente valor,— dijo Yunho —.Sin embargo, la desobediencia es un valor en sí mismo, sé que eres consciente de eso.

La mirada de Siwon se desvió a Jaejoong. Él sonrió. —Sí, en ciertos casos, la desobediencia es también un valor.

Heechul tomó una respiración y Yunho se giró dándole una inquisitiva mirada.

—Ustedes chicos se están divirtiendo,— Heechul acusó.

—No, Jaejoong y yo nos divertimos. Siwon simplemente observó cuando Jaejoong fue castigado por desobediencia.

La cara de Heechul se volvió roja y sonrió. —¿Si soy desobediente, podría Yunho ver?— Heechul le preguntó a Siwon.

—¿Vas a ser desobediente, Heenim?— Preguntó Siwon. Mirando fijamente a Heenim, sus ojos brillaban.

—Podría ser, pero tendrías que prometerme castigarme por eso.

Yunho se rió de la caliente mirada de Siwon. Juraba que podía ver salir vapor de sus oídos. Conociéndolo, sabía que estaba tan excitado que habría un bulto en sus nuevos pantalones negros.

—Bien, suficiente.— Yunho se reía —.Una insinuación más y voy a buscar una hoja de papel y darles un mapa a ustedes dos. Es obvio que se quieren uno al otro. Solo necesitan dejar las evasivas e ir a por eso.

Siwon se veía indignado. Heechul se veía intrigado. Jaejoong solo se reía tranquilamente. Yunho palmeó el hombro de Jaejoong, entonces movió su pierna así él podía levantarse. Sacudió la cabeza, viendo directamente a Siwon y Heechul.

—Heechul, ¿si Siwon quiere llevarte a su casa y entrenarte tú estarías dispuesto a ser su sumiso, incluyendo ser disciplinado cuando hagas algo mal y recompensado cuando lo hagas bien? ¿Qué le dirías?

—¡Infiernos, sí!— Heechul dijo fuerte.

—¡Heenim!— Siwon exclamó —.Maldecir es señal de una mente perezosa. Puedes retirar esa palabra de tu vocabulario de inmediato.

—¿O qué?— Heechul desafió mientras se deslizaba de su silla y se ponía de rodillas a los pies de Siwon.

Yunho ahogó una risa cuando Siwon simplemente levantó una ceja hacia él. Podía ver la explosión que se estaba formando. Siwon no iba a permitir que desafiaran su autoridad, eso era exactamente lo que Heechul estaba haciendo.

—Yunho, ¿te molestaría si utilizo tu habitación extra?— Siwon preguntó poniéndose de pie. Su mirada nunca dejó la ansiosa cara de Heechul—. Creo que este jovencito requiere una apropiada instrucción de respeto.

Esta vez Yunho se rió. —Para nada, adelante. Hay algunos juguetes en la cómoda; seguro que puedes encontrar algunos útiles.

—Vamos, Heenim,— dijo Siwon, caminando hacia la habitación extra.

Heechul se giró y le sonrió a Jaejoong y Yunho. —Funciona todo el tiempo.— Se rió, entonces ansiosamente saltó poniéndose de pie y siguió a Siwon hacia el vestíbulo.

Yunho vio a Jaejoong para ver si sonreía. —¿Estás bien con esto, bebé?

Jaejoong se giró a ver a Yunho. Asintió —Sí. Si Siwon es algo parecido a ti tratará correctamente a Heechul y no tengo dudas de que Heechul lo tratará correctamente.

—Sabes que Siwon es más dominante de lo que yo soy, ¿verdad?— Yunho preguntó.

—¿Es eso posible?— Jaejoong se rió.

—Contrario a la creencia popular, así es.— Yunho tomó la mano de Jaejoong y jaló de él para que se pusiera de pie —.Ahora, ¿estás seguro de que estás bien con que Siwon y Heechul estén juntos?

—Sí, ¿por qué? ¿Tienes un problema con eso?— preguntó Jaejoong.

—No, para nada.

—Pensé, que quizás con tu pasada, uh… relación… con Siwon podría ser difícil verlo con alguien más.

Yunho oyó la inseguridad en la voz de Jaejoong. Acunó la cara de Jaejoong en sus manos y se inclinó para darle un suave beso. Trató de colocar todo el cuidado y cariño en ese beso, quería asegurarle a Jaejoong que era el único hombre para él.

Levantando la cabeza, Yunho sonrió. —Nunca quise a Siwon de la manera en que te quiero a ti, bebé. Nosotros solo somos amigos y ocasionalmente hemos tenido sexo. Ni siquiera hemos tenido una cita.

—¿Nunca?

Yunho sacudió la cabeza. —Nosotros cuidamos al otro, pero eso solo es porque somos amigos desde hace mucho tiempo. Nunca ha habido nada entre nosotros, solo una amistad. El sexo es un bono extra. Ahora que te tengo, no necesito a Siwon, por eso él y yo solo somos amigos de nuevo.

—¿Qué si cambias de opinión?

—Eso no va a suceder, bebé.— Yunho sonrió —.Tú eres todo para mí. ¿Qué podría necesitar de alguien más cuando tú me das todo lo que necesito en el mundo?

—¿Todo?— Jaejoong preguntó.

—Todo, bebé.

—¿Entonces por qué no me amas?— Jaejoong murmuró.

Yunho se quedó con la boca abierta. Vio a Jaejoong aturdido y asombrado. Finalmente cuando se recuperó del shock inicial, le dijo, —Jaejoong, yo te amo. ¿Qué te hace pensar lo contrario?

La mirada de Jaejoong se fue al suelo y se encogió de hombros. —Nunca dices nada.

—Jaejoong, te digo que te amo cada vez que te digo bebé, cada vez que hago el amor contigo. Infiernos, te digo que te amo cada vez que te disciplino.

—¿Me amas?— Jaejoong murmuró mirando a Yunho.

—¿Desde cuándo estás preocupado por esto?— Preguntó Yunho. Creía que le mostraba constantemente su amor a Jaejoong. Ahora se daba cuenta que estaba equivocado. ¿Cómo no sabía que él lo amaba?

—Nunca dices nada,— Jaejoong contestó —,ni siquiera después de que yo te lo digo.

—Creí que quedaba entendido. ¿Por qué crees que quiero que vivas conmigo y estés conmigo? Cuando te dije que eras mío, eso quería decir. Lo eres, Jaejoong.

Yunho podía ver las dudas aun brillar en los ojos de Jaejoong. Sabía que era su culpa. Debería de haberse asegurado que supiera exactamente cómo se sentía él desde el comienzo. El corazón de Yunho dolía al saber que Jaejoong había estado preocupado todo este tiempo.

—Escúchame, Kim Jaejoong,— Yunho dijo firmemente, usando su voz de Amo —.Tú me perteneces a mí y yo te pertenezco a ti. Esto no es: tú y yo. Esto es un nosotros.

—Yunho...

—¿No lo comprendes, bebé? Yo puedo ser el dominante en nuestra relación y tú mi bebé, pero todas las cosas que yo tengo incluyendo mi corazón, todo lo que soy, todo te pertenece. Tú eres mi propietario, bebé.

—Amo,— Jaejoong murmuró, sus ojos llenos de lágrimas —.Te amo, Amo.

Yunho envolvió sus brazos alrededor de Jaejoong y lo acercó a su pecho. —También te amo, bebé. Siempre lo haré.

—Amo,— dijo Jaejoong, presionando su cuerpo contra el de Yunho. Yunho podía sentir el duro pene de Jaejoong presionándose contra su abdomen.

Yunho gruñó. —Nunca debí de haberte dicho sobre esa maldita palabra.

Jaejoong inclinó la cabeza y lo vio. —¿Quieres qué me detenga?

—Infiernos, ¡no!