~♥~

~♥~

miércoles, 24 de diciembre de 2014

Capítulo 2

Yunho miró a la cabeza que descansaba sobre su pecho. Sacudió la cabeza con asombro por todo ese cabello dorado, rubio blanco que cubría la cabeza de Jaejoong. Su pelo era tan ligero que parecía que cada hilo hiciera girar la luz del sol.


Jaejoong había capturado su atención desde el momento en que lo vio escondido entre las sombras en el garaje de Hyunjoong. Si un flujo repentino de luz de la oficina de Hyunjoong no hubiera elegido el momento exacto para golpear a Jaejoong, Yunho estaba seguro de que jamás habría visto al hombre, y eso hubiera sido una lástima.

Yunho había llegado al garaje de Hyunjoong después de descubrir que Hyunjoong lo había engañado. Las piezas de motocicleta que Hyunjoong le había vendido a los Death Dealers eran partes malas, que se descompondrían antes de poder utilizarlas.

Nadie engañaba a los Death Dealers y se salía con la suya. Yunho había ido al garaje de Hyunjoong, decidido a darle a Hyunjoong una lección. En cambio, había descubierto a Jaejoong. Yunho no podía ni siquiera pensar en lo emocionado que había estado en el momento que se enteró de que Jaejoong le pertenecía a Hyunjoong. Una vez que todo se había acordado, Yunho no tenía sentimientos de culpa por tomar a Jaejoong como pago por la deuda de Hyunjoong.

Los golpes en la cara de Jaejoong solo le decían a Yunho que él podía ofrecerle a Jaejoong una vida mejor de la que había tenido con su padrastro, aunque solo fuera como la mascota de Yunho. Jaejoong no podía ser otra cosa. La vida que Yunho llevaba era muy dura.

Jaejoong no era lo suficientemente fuerte para ser un Death Dealer. Requería fuerza, experiencia y un poco de locura ser un Death Dealer. Yunho dudaba que Jaejoong fuera lo suficientemente grande como para montar una moto por sí mismo.

Pero Jaejoong era simplemente perfecto para lo que Yunho tenía en mente para él. Jaejoong tenía una belleza etérea que había encantado a Yunho en el momento que lo había visto. El cabello rubio dorado y unos ojos oscuros que solo aumentaban el encanto de Jaejoong.

Lo que realmente había vendido la idea a Yunho de tener a Jaejoong, fue la forma en que el pequeño hombrecito había atacado a Hyunjoong. Jaejoong había sido tan feroz, incluso cuando se enfrentó a un hombre que era mucho más grande que él y que lo había golpeado, probablemente en numerosas ocasiones.

Jaejoong ni siquiera vaciló. En el momento en que se dio cuenta que Hyunjoong lo había vendido, Jaejoong se había vuelto loco. La única razón por la que Yunho no había dejado a Jaejoong atacar a Hyunjoong era porque no quería que Jaejoong fuera herido de nuevo. Pero Yunho se sentía extrañamente orgulloso de la feroz forma en que se había comportado Jaejoong contra Hyunjoong. Demostraba que Jaejoong tenía valentía, incluso si se trataba de una pequeña.

Yunho estaba seguro de que Jaejoong la iba a necesitar en la nueva vida que iba a tener. A pesar de que Yunho había reclamado a Jaejoong frente al resto de la banda para protegerlo, siempre existía la posibilidad de que alguien intentara hacerle daño a Jaejoong, o se lo llevara.

Tan lindo como Jaejoong se veía, Yunho sabía que iba a ser eso último. Jaejoong podría ganar mucho dinero en el mercado abierto de esclavos. Las oscuras y largas pestañas que cubrían sus ojos oscuros por si solas podían llevar a un hombre grande a caer sobre sus rodillas.

Yunho tendría que mantenerlo vigilado desde los dedos de sus manos hasta los dedos de sus pies para proteger a Jaejoong de la chusma que habitaba el mundo a su alrededor. No había muchos lugares donde poder estar a salvo de cualquier persona, ya que la plaga se había hecho cargo del mundo y había matado a la mayoría de la población. Lo que quedaba casi ni valía la pena ser protegido. Después de que el polvo se había asentado, por así decirlo, la gente que quedaba en el mundo se había unido en pequeños grupos por seguridad.

Yunho había perdido a su familia mucho antes de que la plaga golpeara. Su madre murió por tener tres trabajos, su padre de alcoholismo. Cuando la peste golpeó, la vida de Yunho no cambió mucho. Se unió a los Death Dealers, se abrió camino trabajando duro hasta que se convirtió en el líder.

Y había un montón de ventajas al ser el líder de una de las bandas de motociclistas más temidas en la costa oeste, entre las que estaba poder reclamar a Jaejoong como suyo. Yunho estaba bastante seguro de que los beneficios especiales rápidamente se iban a convertir en lo más importante.

Yunho volvió a mirar la cabeza apoyada sobre su pecho. Jaejoong tenía los ojos cerrados como si ni siquiera percibiera que aceleraba por la autopista a casi cien kilómetros por hora. Él no había dicho ni una palabra desde que habían salido de la cochera. Ni siquiera había protestado porque ahora le perteneciera a Yunho. Jaejoong solo había recogido sus cosas y seguido a Yunho fuera del edificio.

Girando la moto, Yunho la llevó por el camino principal que corría a lo largo de la pequeña ciudad que los Death Dealers habían reclamado como propia. No era nada más que un viejo pueblo fantasma, pero era de ellos. Yunho había descubierto la vieja ciudad fantasma desde hacía ya varios años. Cuando se convirtió en el líder de los Death Dealers, se movieron de la gran ciudad a este pequeño pedazo de tierra.

Yunho estaba muy orgulloso del hecho de que en su pequeña ciudad tenían una tienda de comestibles, una escuela, una peluquería, un taller de reparación de motocicletas, una tienda mercantil, un pequeño café, e incluso una cárcel. El edifico más grande de la ciudad era el hotel. Y fungía como su oficina central.

Como el líder de los Death Dealers, contaba con el más grande alojamiento en el hotel. Sus habitaciones estaban en el segundo piso del hotel, ocupando todo el frente del edificio. Desde el balcón, Yunho podía supervisar toda la ciudad. Él también tenía una gran oficina en la planta principal con una caja fuerte.

Yunho se detuvo en su lugar del estacionamiento reservado en frente del hotel. Él miro a Jaejoong. Esperaba que a Jaejoong le gustara, porque no se iba a ir de aquí en un corto plazo. Yunho también tenía la esperanza de que Jaejoong se adaptara a ser la mascota de Yunho.

No sería fácil, no para ninguno de ellos. Yunho vivía en lo que era esencialmente un mundo de Amo/esclavo. Aquellos que eran más fuertes protegían a los que eran más débiles, pero la protección tenía un precio.

Los amos daban protección y atención a los esclavos. A cambio, los esclavos siempre mantenían a sus amos con comodidad y entretenimientos, y veían por sus necesidades sexuales. En el mundo en el que ahora ellos vivían, eso era un cambio equitativo.

Yunho se había resistido a adoptar una mascota en el pasado. Él no quería responsabilidades adicionales. Él ya tenía toda una pandilla y una ciudad llena de gente a la cual cuidar. Pero había algo en Jaejoong que había llamado la atención de Yunho. Él tenía que tenerlo.

—Hey, pequeño, ¿estás listo para entrar a ver tu nueva casa?— Yunho preguntó.

Jaejoong se encogió de hombros. Yunho agachó su cabeza e inclinó su espalda para poder mirar hacia abajo a los ojos negro noche de Jaejoong. —Esto va a estar bien, Jaejoong. No voy a dejar que nadie te lastime nunca más. Tú me perteneces a mí, y nadie se mete con lo que es mío.

Jaejoong no parecía creerle a Yunho. Él tuvo un repentino deseo de sentir los labios suaves y rosados de Jaejoong contra los suyos, se inclinó para besarlo. Fue todo lo que Yunho había esperado y más. Los labios de Jaejoong eran tan suaves y tan apetitosos. Yunho no pudo contener un gruñido profundo mientras se ponía más cerca de Jaejoong.

Cuando Yunho finalmente levantó la cabeza, la cara de Jaejoong se sonrojó. Él vio como los ojos de Jaejoong se dirigieron hacia él, entonces los dejó caer con la misma rapidez. Claramente Jaejoong se veía avergonzado, pero el bulto duro en sus pantalones, le dijo a Yunho que Jaejoong había disfrutado de su beso.

—¿Qué está mal, pequeño?— Yunho preguntó en voz baja. Él frotó con el pulgar el lado de la cara de Jaejoong que no estaba lastimada. Cuando Jaejoong se encogió de hombros una vez más, Yunho se rio entre dientes. —Uh uh, pequeño. Eso no sirve. Te hice una pregunta y quiero una respuesta. ¿Qué pasa?

Los ojos de Jaejoong se volvieron hasta encontrarse con Yunho.

—Yo no sabía que quisieras hacer eso.

—¿Hacer qué?

—Cua…cuando me besaste. Eso está mal y yo no debo hacerlo.

Las cejas de Yunho se juntaron cuando frunció el ceño. —¿Quién te dijo eso?

—Hy… Hyunjoong— Jaejoong respondió.

—¿Y le crees?— Yunho se rio entre dientes. —Ese es el mismo hombre que te golpeaba y se llevaba todo tu dinero, y quien luego te vendió a mí. De alguna manera, pequeño, no creo que Hyunjoong tenga autoridad sobre nada. Además, ahora que tú me perteneces a mí, lo que yo diga es lo que importa, no lo que haya dicho Hyunjoong.

Yunho se emocionó cuando Jaejoong dejó escapar una pequeña risa. —Supongo— Jaejoong dijo.

La cara de Yunho se inclinó de vuelta hacia la suya. —No te preocupes por él, Jaejoong. ¿Prefieres creer en mí o en tu padrastro?

Jaejoong estaba tan silencioso que Yunho casi tuvo miedo de que no le respondiera. Sin embargo, cuando lo hizo, no era la respuesta que Yunho estaba esperando, pero le emocionó de la misma manera.

—¿Está bien, que te bese yo?

Yunho se echó a reír. —Eso está bien. De hecho, lo prefiero. Siempre y cuando recuerdes que solo se te permite besarme a mí. Si te pillo besando a otra persona, lo que te hizo Hyunjoong solo será un juego de niños. ¿Lo entiendes?

Jaejoong rápidamente asintió con la cabeza. Yunho vio varias emociones moviéndose por la cara de Jaejoong, deseaba poder leer un poco la mente del pequeño hombre. Parecía querer decirle algo, pero Jaejoong tenía miedo o vergüenza.

—¿Qué quieres preguntar?— Yunho le preguntó, tratando de que Jaejoong estuviera a gusto.

—Cuando estaba trabajando con Hyunjoong en el taller de reparaciones. Arreglé todos los coches que Hyunjoong me dijo que arreglara, limpié la tienda, y me mantuve fuera del camino de Hyunjoong.— Jaejoong miró a Yunho. —¿Tu qué quieres que haga? ¿Se supone que debo arreglar tu motocicleta?

Yunho negó con la cabeza. —No, Jaejoong.— Se dio cuenta de que Jaejoong realmente no tenía ni idea de lo que se esperaba de él. Mientras Yunho esperaba que Jaejoong no luchara mucho contra él cuando se enterara de cuáles eran sus funciones, Yunho no iba a renunciar a él.

—Tu única obligación es hacia mí.— Dijo Yunho. —Responderás a mí y solo a mí. Si te portas bien y haces lo que te digo, te recompensaré. Sin embargo, si te portas mal, te castigaré. Realmente preferiría no tener que castigarte Jaejoong, por eso necesitas escuchar lo que te digo.

Jaejoong tragó saliva, asintió con la cabeza. —Sí, creo que prefiero eso, también.

Yunho se rio entre dientes. Levantó a Jaejoong, lo puso en pie y se bajó de su moto. Yunho se inclinó y abrió su alforja. Sacó un collar de cuero unido a lo largo de una cadena. Podía ver como los ojos de Jaejoong se hacían más grandes mientras se ponía de pie de nuevo.

—Hasta que pueda marcarte de forma permanente, tendrás que usar esto.— Yunho dijo mientras ponía la tira de cuero negro alrededor del cuello de Jaejoong y hacia clic en el collar cerrándolo. —Esto le dirá a todos que me perteneces y que si se meten contigo, se están metiendo conmigo.

Los dedos de Jaejoong se movieron poco a poco a lo largo de la cadena de plata, sus ojos se movieron para reunirse con los de Yunho. —¿Yo soy tu mascota?

Yunho podía escuchar la preocupación y la confusión en la voz de Jaejoong. Podía verlo en los dedos temblorosos de Jaejoong. Yunho deseaba que hubiera una forma más fácil de introducir a Jaejoong en su nueva vida, pero simplemente no había tiempo. Jaejoong tenía que llevar la marca de Yunho antes de entrar o alguien trataría de reclamarlo y luego Yunho tendría que hacerle daño.

—En cierto sentido, sí.—  Yunho asintió con la cabeza. — Recuerdas que te lo dije, tú me perteneces. Tú eres mi posesión, mi mascota. Tú haces lo que te digo cuando te lo digo. Si te digo que te quites toda la ropa en una habitación llena de gente, yo espero que tú lo hagas sin protestar.

Yunho no creía que fuera posible, pero los ojos de Jaejoong se abrieron mucho más. Esta vez, sin embargo, su rostro pálido, desprovisto de color los resaltó. Esto hacía que el negro de los ojos de Jaejoong destacara aún más, haciendo que se vieran enormes.

—¿Tu… tú quieres que me quite toda la ropa en una habitación llena de gente?— Jaejoong susurró, con claro horror en su voz.

—Si yo te lo digo a ti, sí. Sin embargo, no lo haré. Lo que me pertenece es solo para mis ojos.— Yunho se acercó y quitó un poco del cabello blanco de la frente de Jaejoong. —Tú debes hacer todo lo posible para recordar esto, Jaejoong. No comparto. Nunca.

—Yo no entiendo nada de esto.— Jaejoong murmuró.

Yunho sabía que Jaejoong estaba hablando con él mismo, y que no había tenido la intención de que Yunho lo escuchara. Yunho se acercó a él y le dio unas palmaditas en la espalda a Jaejoong. —Yo sé que no, bebé y por eso voy a tratar de hacértelo lo más fácil posible para ti como pueda. Solo recuerda hacer exactamente lo que yo te diga y te irá bien.

Jaejoong ni siquiera asintió. Él solo llevo las manos a la funda de su almohada y la acercó a su pecho, mientras miraba al suelo. Yunho respiró hondo y soltó el aire lentamente. Esto no iba a ser fácil para ninguno de ellos. Yunho nunca había tenido una mascota antes, y Jaejoong obviamente, no tenía idea de lo que era una mascota. Solo tendrían que a travesar por esto.

Yunho tomó sus alforjas de la motocicleta con una mano. Con la otra, agarró el extremo de la cadena unida al collar de Jaejoong. —Vamos, bebé, vamos a ponerte cómodo. Estoy seguro de que te gustaría una comida caliente y tomar un baño caliente.

Yunho empujó a Jaejoong detrás de él cuando lo llevó hacia el hotel. Podía ver a la gente mirándolo fijamente. Podía sentir su curiosidad acerca de Jaejoong y ver al instante la excitación que Jaejoong inspiraba en casi todo el mundo que lo miraba. A él no le sorprendió.

Jaejoong estaba más allá de ser hermoso. Yunho casi tenía miedo de ver cómo se vería Jaejoong después de algunas buenas comidas y un baño caliente. Un poco más de carne en sus frágiles huesos, un poco de jabón y agua, y Yunho estaba seguro de que Jaejoong sería impresionante.

Él no podía ser menos. La delicada estructura ósea de la cara de Jaejoong le hacía parecer como un elfo. El cabello dorado, blanco rubio que caía en ondas hasta los pequeños hombros de Jaejoong y ojos grandes, negros dominaban su rostro lo que hacían que Jaejoong pareciera irreal.

Tanto como Yunho sabía que iba a tener una pelea entre sus manos por la posesión de Jaejoong una vez que estuviera limpio, Yunho no podía esperar para verlo. También estaba desesperado por explorar toda esa pálida carne oculta detrás de unos jeans holgados y una camisa sucia que llevaba Jaejoong.

Yunho sabía lo que necesitaba para establecer su reclamo sobre Jaejoong. Solo necesitaba encontrar a la persona adecuada para hacer un ejemplo de eso. Él no quería lastimar a nadie, solo lo suficiente como para darles a entender a todos con claridad que Jaejoong le pertenencia a él.

—Linda mascota, Yunho.— Alguien le dijo a Yunho mientras llevaba a Jaejoong al edificio. Si, si, Yunho ya sabía eso.

—¿Va a bailar para nosotros?— ¿Alguien gritó bailar? Si, ¿Para todos? No, para Yunho definitivamente.

—Te hago una oferta por él, Yunho— Nop, no va a pasar.

—¿Lo vas a compartir, Yunho? No me importaría darle con mis manos un poco de calor a ese culo.— Gritó otra voz.

¡Bingo!

Yunho se detuvo tan rápido que Jaejoong se tropezó con él. Llegó detrás de él y estabilizó a Jaejoong con la mano y se volvió para mirar a la ofensiva voz. Seungheon. Él debía haberlo sabido. A Yunho no le gustaba Seungheon. El hombre era un dolor de bolas que disfrutaba herir a otras personas. Yunho no podía encontrar la manera de echarlo de la banda.

Tal vez podría matar dos pájaros de un tiro. Podía demostrarles a todos que Jaejoong le pertenecía a él y solo a él. Al mismo tiempo, tendría una excusa para deshacerse de Seungheon. Todo el mundo sabía que Yunho no iba a aceptar la falta de respeto de nadie. Yunho se enorgullecía de eso.

—¿Qué has dicho, Seungheon?— Yunho dijo en voz baja. Eso debió haber sido la primera pista para Seungheon. Cuando Yunho realmente se enojaba, se ponía muy tranquilo.

—Te pregunté si ibas a compartir a tu pequeña mascota, Yunho— Seungheon respondió mientras caminaba unos pasos más cerca. Él miro sobre los hombros de Yunho donde Jaejoong se acurrucaba, una mueca cruzó por sus labios. —Tengo una linda mascota también. Te la cambio por una noche. GD te puede dar un buen momento.

Yunho miró con disgusto como Seungheon tiraba de la cadena en su mano. Un pequeño hombre, solo un poco más bajo que Jaejoong, se tambaleó hacia adelante para caer a los pies de Seungheon. Los moretones descoloridos en el rostro del hombre daban fe de los malos tratos que Seungheon le daba a su mascota.

Algunas personas eran así. Veían a su mascota como solo eso, una mascota. Ellos no los veían como seres humanos, que se comerciaban ellos mismos con los amos por la protección que ofrecían. Seungheon se agachó y tiró con un puño del pelo de GD, tirándole la cabeza hacia atrás. —GD es muy obediente y si no es así, siempre puedes castigarlo.

Yunho no se sorprendió cuando escuchó un gruñido detrás de él. Él sabía sin mirar que provenía de TOP. Seungheon y TOP a menudo se peleaban por como Seungheon trataba a GD. Yunho sospechaba que TOP sentía algo por GD, aunque él nunca había dicho nada.

Tal vez podría matar a otro pájaro aquí. Yunho se acercó a la correa de GD. Podía ver la alegría en los ojos de Seungheon rápidamente le entregó la correa a Yunho. Antes de que Seungheon pudiera llegar a la correa de Jaejoong, Yunho le entregó las dos a TOP.

—Agárralas, TOP— Yunho dijo, cuando se volvió de nuevo hacia Seungheon, Yunho apretó su puño y lo metió en medio de la cara de Seungheon. Tuvo la satisfacción de oír como el cartílago de la nariz de Seungheon se rompía bajo el poder detrás de su golpe.

Seungheon estaba tan aturdido por el repentino ataque de Yunho que se tardó otros tres ataques antes de que Seungheon comenzara a resistirse y luchar. Yunho sintió como un golpe le dio en la cara, pero se lo quitó de encima y después fue contra Seungheon con renovado vigor.

Varios golpes más, unas cuantas patadas, y un par de golpes por el cuerpo más tarde, Seungheon yacía en el suelo ensangrentado. Yunho se puso encima de él, su pecho subía y bajaba con rapidez. Sus puños con sangre y moretones los mantuvo a los costados.

Yunho levantó la cabeza y dejó que su mirada furiosa recorriera a todos por la sala. —Jaejoong me pertenece a mí. Él es mi mascota.— Yunho dijo entre dientes severamente. —Yo no comparto. Voy a matar a la siguiente persona, hombre o mujer, que incluso piense en llevárselo de mi lado.

Había varias cabeza moviéndose y pocas sonrisas tranquilas. No a mucha gente le gustaba Seungheon. Ellos lo soportaban porque él estaba allí. Pero eso estaba a punto de terminar. Yunho se volvió hacia TOP y le tendió la mano a la correa de Jaejoong.

Cuando también le tendió la correa de GD, Yunho negó con la cabeza. —GD te pertenece ahora a ti, pero espero que lo cuides mejor de lo que lo hizo Seungheon. No quiero ver más golpes sobre él. ¿Me has entendido?

TOP se quedó boquiabierto por la sorpresa. Y rápidamente de golpe la cerró cuando asintió con la cabeza. La mirada que TOP le dio a GD le dijo a Yunho que GD estaba en buenas manos. TOP lo cuidaría y lo trataría como una mascota debía ser tratada. Yunho tenía una idea de que la vida de GD estaba a punto de cambiar a lo grande.

—No puedes hacer eso.— Seungheon gritó cuando él se puso en pie. Limpiándose la sangre de sus labios con la mano continuó. —GD me pertenece a mí. Lo reclamé como mío y de nadie más. Tú no tienes derecho a quitármelo.

Yunho se volvió hacia Seungheon, la ira lo llenaba haciendo que sus músculos se contrajeran preparándose para la lucha que sabía se avecinaba. —Tengo todo el derecho. Yo soy el líder de los Death Dealers. Puedo hacer cualquier maldita cosa que quiera.

—Entonces, te reto por el liderazgo de los Death Dealers.

Gran sorpresa allí. Yunho alcanzó su mano atrás de él, regresándole la correa de Jaejoong a TOP.

—TOP, cuida de Jaejoong, hasta que termine con este cabrón.

—¿Yunho?

Yunho se volvió para mirar a Jaejoong. Extendió la mano y acarició un lado de la cara de Jaejoong. —Todo está bien, pequeño. Tú debes hacer todo lo que TOP te diga hasta que haya terminado aquí, y luego subiremos y tendremos aquel baño.

Los ojos de Jaejoong se agrandaron y dominaron su pálida cara cuando él asintió con la cabeza. Agarrando la funda con sus pertenencias más cerca de su pecho, Jaejoong se acercó para estar más junto a TOP. Yunho asintió con la cabeza, y le dio una pequeña sonrisa para tranquilizar a Jaejoong. Jaejoong aprendía rápidamente. Eso era un buen presagio para su futuro juntos.

Jaejoong tenía mucho que aprender acerca de lo que se esperaba de una mascota, especialmente la mascota del líder de los Death Dealers. Yunho se sintió alentado por la rápida obediencia de Jaejoong eso podía llegar a ser un entendimiento más rápido de lo que había pensado inicialmente.

Una vez que Yunho estuvo seguro de que TOP iba a tener mucho cuidado con Jaejoong, dio media vuelta para hacerle frente a Seungheon. Él no se sorprendió por la mirada de suficiencia en el rostro de Seungheon. Seungheon siempre se había sentido como si fuera mejor que los demás. Era una de las muchas razones por la que los otros en la banda lo odiaban.

—Una vez que sea líder, voy a divertirme con tu pequeño juguete, Yunho.

Yunho alzó una ceja ante la insistencia de Seungheon de que le iba a ganar. —TOP— Yunho dijo, ni siquiera volvió la cabeza para mirarlo. —Si algo me pasa a mí, Jaejoong te pertenece a ti. En el momento en que pienses que voy a perder, tomas a Jaejoong y te vas. Seungheon no lo va a tener. ¿Me entiendes?

—Si, Yunho.— TOP respondió.

Yunho asintió con una sonrisa al ver el rostro lleno de rabia de Seungheon. No importaba lo que pasara, Seungheon ahora sabía que sus manos nunca llegarían a Jaejoong. En el momento en que percibiera que Yunho podía perder, TOP se iría y se llevaría a Jaejoong con él.

Sin embargo, él no tenía ninguna intención de perder. Por el contrario él tenía mucho por qué esperar con impaciencia. Yunho le hizo señas con las manos a Seungheon para atraerlo hacia él. Estuvo satisfecho cuando la cara de Seungheon se puso aún más roja.

Seungheon era imprudente cuando se enojaba. Hizo varios movimientos estúpidos. Él no pensaba las cosas, solamente reaccionaba. Antes de que Seungheon tuviera su primer batazo, Yunho supo que la pelea había terminado. Seungheon iba a perder.

Yunho esquivó un giro de Seungheon y llevó su puño a las costillas de Seungheon. Se estremeció un poco por la fuerza de sus nudillos golpeando a Seungheon, pero él había logrado lo que se propuso hacer. Había escuchado las costillas de Seungheon romperse. Yunho aterrizó otro golpe en los riñones de Seungheon.

Estaba a punto de girarse sobre sus piernas por detrás de Seungheon y empujarlo a su espalda cuando escuchó que alguien gritaba y sintió un dolor agudo y repentino en el costado. Antes de que Yunho pudiera incluso dar un paso atrás, supo que Seungheon lo había apuñalado.

Justamente le mostraba lo que Seungheon podía hacer para quitarle el liderazgo. A él le gustaba hacer trampa, especialmente cuando iba perdiendo. Y no importaba la cantidad de sangre que goteara por la pequeña herida en su costado, Yunho todavía estaba decidido a ganar.

Yunho se dio la vuelta agarró la mano que sostenía el cuchillo de plata entre sus manos. La otra mano se envolvió en la garganta de Seungheon, apretándola lentamente. Yunho en realidad no quería matar a Seungheon, pero él sabía que estaba suficientemente enojado en este momento como para hacerlo.

Trató de recuperar el control de su temperamento, incluso cuando sus dedos se estrecharon un poco más alrededor de la garganta de Seungheon. Él estuvo un momento inestable cuando Seungheon cayó de espaldas al suelo. Después de que cayera hacia abajo, Yunho se sentó a horcajadas sobre el cuerpo de Seungheon.

Él forzó a la mano con el cuchillo a ir hacia la garganta de Seungheon, agarrándola con ambas manos. La hoja afilada quedó más cerca de la garganta de Seungheon, sus ojos se agrandaron más. Él comenzó a luchar salvajemente.

Mientras que Yunho presionaba la hoja contra la garganta de Seungheon, Yunho miró hacia abajo. —¿Te rindes?

Yunho sabía que era raro que un líder de la banda fuera indulgente cuando se le cuestionaba su posición. Muchas personas pensaban que Yunho era demasiado suave, pero en realidad a él no le gustaba cometer asesinato. Esto no quería decir que no lo hiciera cuando tenía que hacerlo. Él lo haría, como ahora.

—Yo te voy a matar— Seungheon gruñó. —Y luego voy joder a esa pequeña mascota tuya hasta que sangre.

Bueno eso lo decía todo, pensó Yunho. Seungheon tenía que morir. Él metió el cuchillo en el cuello de Seungheon. Nadie amenazaba a su mascota y vivía. Era tan simple como eso. Yunho vio la luz en los ojos de Seungheon lentamente desvanecerse mientras la sangre fluía de la gran herida en su cuello.

Yunho cerró los ojos por un momento, para tomar varias respiraciones profundas. El olor de la sangre agobió a Yunho y le recordó sus propias lesiones. Tenía que llegar arriba y ver qué tan malo era el daño. Pero primero…

Se puso en pie de un salto, Yunho miró a lo largo de la multitud que le rodeaba. —Como ya he dicho antes, nadie toca a Jaejoong, excepto yo. Él me pertenece y voy a matar a cualquiera que lo toque. ¿Me entienden?

Tan pronto como todo el mundo asintió, Yunho dejó caer el cuchillo que tenía en la mano al suelo. Se apartó del cuerpo de Seungheon, y cogió la correa que TOP le ofrecía. Yunho tiró lo suficiente de la correa para tener a Jaejoong a su lado.

Se dirigió hacia la escalera, deteniéndose para mirar hacia atrás sobre su hombro a TOP. —Saca eso de aquí.—

Yunho, dijo mientras señalaba el cuerpo de Seungheon. —Y consigue a alguien que limpie el desorden, luego lo mandas a mi habitación. Jaejoong tiene hambre y necesita una comida caliente.

—Seguro, Yunho— dijo TOP, con una leve sonrisa adornando sus labios.


Yunho ni siquiera había dado dos pasos cuando escuchó a TOP dar órdenes a las personas para que limpiaran el desorden y se deshicieran del cuerpo. Sabía que TOP cuidaría de las cosas hasta que Yunho pudiera. Mientras tanto, necesitaba un baño y descansar un poco.

16 comentarios:

  1. OMGSUN! esto esta intenso, yunho definitivamente y sin dudas fue cautivado por JJ y es que como no, se entiende su miedo porque se lo quieran arrebatar y a pesar de que ahora nadamas piensa en él como una mascota ojala se vaya dando cuenta que Jaejoong debe ser más que eso para él! no imagine que yunho hiciera eso con seungheon pero es que este bien se la busco, más en claro no pudo dejar yunho que nadie se debe acercar a jae porque le pertenece ;; anjsdf, me encanta esta historia, es genial, gracias por compartirla y actualizar pronto! <3

    ResponderBorrar
  2. Yunho es un gran líder a pesar de todo... y parece que Jaejoong no le va hacer tan difícil acostumbrarse... Yunho parece ser muy gentil .... esta muy interesante ... gracias estaré esperando otra actualización

    ResponderBorrar
  3. OMG!! qcap.. y ya Jae tendra una noche loca xD con su amo~ gdfghdkghadfghadk me encanta cuando yunho es asi de malote~ pero con Jae es *---* ya qiero lemon xD okno~ bueno si xD ahhhhhh como lo reclamo delante de ese tipo... aunq cuando dijo a Top q si algo le pasaba,... me da mala espina siento q mas adelante algo pasara... Y_Y no quiero..

    ResponderBorrar
  4. waaa!!! me encanto.
    un yunho todo malote pero bueno y gentil con jae <3
    pobre GD, ahora TOP lo cuidara :)
    espero mucho de la historia, jae tiene maravillado a yunho espero luego se convierte en amor

    ResponderBorrar
  5. omg me encanto!! seguro q yunho va a cuidar de jae y no va a dejar que nadie lo toque adada
    me encanto que matara al maldito ese e.e
    esta genial gracias x compartir ^^

    ResponderBorrar
  6. Yunho quedo enamorado de jae ** ese Seungheon era un tramposo y yunho hasta el ultimo le dio una oportunidad pero no la aprovecho. Que bonito q yunho le diera a top el cuidado de GD <3 definitivamente tendra una mejor vida q con el otro abusivo.

    ResponderBorrar
  7. Waaaaa Yunho es taaaannnn genial cuidando de Jae me encanto el cap
    gracias besos y feices fiestas

    ResponderBorrar
  8. Esta muy buena la historia, muy buena en verdad.... Gracias

    ResponderBorrar
  9. Yunho agresivo es sexy X3.
    tenia que morir ese tipo era un gran peligro si seguía con vida .
    Como es eso que Yunho tiene que reclamar a Jaejoong delante de todos ¿ lo hará ¿ que emoción ! X3 .
    Gracias por el capitulo ;)

    ResponderBorrar
  10. Jae es toda inocencia, pero se vio valiente cuando se sintió apoyado por Yunho cuando lo de
    Kim HyunJoong, es hizo que Yunho lo admirara y se sintiera mas atraído por ese pequeño --
    hombrecito hermoso. Bien de demostrar quien es el dueño de Jae ante Seunheong o como se
    diga, ya que este es repudiado por su pequeño pueblo, con esto demostró que nadie se puede
    meter con Jae. Espero que la herida no se a grave y se cure pronto.
    Gracias esta muy interesante. Hasta luego.

    ResponderBorrar
  11. gracias por otro capi ....... yunis es un poco violento ......jeje
    espero y los dos acaben bien juntos y felices continua pronto <333333

    ResponderBorrar
  12. eso es yunho cuida lo que te pertenece ahora si que nadie tendrá ni las mínimas intenciones de querer tener a jae para ellos por que ya saben cual sera su final si se atreven siquiera a soñar con ello
    y jae se a de sentir muy contento de tener a un hombre como yunho a su lado pues lo defiende con todo que bello
    GRACIAS por la historia me encanta espero el siguiente hasta pronto bye

    ResponderBorrar
  13. madre mía.... no se juega con Yunho....
    es muy posesivo y territorial y por lo que se ve , se enamorará como loco de su mascota
    gracias por el capítulo

    ResponderBorrar
  14. Definitivamente es mala idea meterse con Yunho y lo que le pertenece, waaaaaaa lo amo asi tan posesivo y malote !!
    Ese tipo se llevo su merecido y se que TOP tratara mejor a GD !!
    Gracias por tan bello fic !!

    ResponderBorrar
  15. Asi sea hace Yunho desde el comienzo debe de quedar bien en claro que nadie puede tocar a Jaejoong ....kyyaa tan posesivo y rudo Yunho no creo que solo lo quiere como su juguete después jejeje ....que bueno ahora GD esta buenas manos TOP lo tratará muy bien

    ResponderBorrar
  16. Jae la mascota de Yunho!!!! Jae como siempre es perfecto, Yunho demostrando que lo suyo es suyo, bien echo!!! y por ultimo el golpe final...me da gustos que lo matara...y TOP tiene a GD xDDD igual estoy mas que segura que el lo cuidara muchoooo,

    ResponderBorrar