Capítulo 3 - Persecución a la realidad

Jaejoong estaba acostado en su cama, ya inmerso en su tercer sueño...

Estaba en un pasillo, iluminado por luces de neón azules, verdes y moradas. Caminó todo el tramo hasta que vio la silueta de alguien conocido.

-Tú eres...-

-Sí, soy yo. Y te estoy esperando, Jaejoong. No me hagas ir por ti- habló una sensual y profunda voz, sacudiendo todo su ser del pelinegro

-Te... te equivocas... ¡tú no eres real, no me tocarás nunca!- gritó asustado, abrazándose a sí mismo

-Mi pequeño... estás muy equivocado si crees que te voy a tener paciencia- sin esperarlo, el cuerpo del otro ya lo tenía presionado contra la pared -No hagas que mi paciencia se agote porque aquí el único perjudicado, serás tú- susurró amenazante en su oído, agarrándole por las muñecas para tenerlas inmóviles contra la pared, al igual que su cuerpo

-Yo... no... tu... mmhh- gimió sintiendo la rodilla del otro subir lentamente por su muslo y aplastar ligeramente su miembro semi erecto

-Apiádate de las consecuencias, Kim Jaejoong...- susurró muy cerca de sus labios

¤¡Despiérta~! ¡Despiérta~! ¡Hora de despertar~!¤

Su alarma lo despertó.

Sudoroso, aturdido y con su primera erección por un sueño húmedo de adolescentes, se dirigió al baño por una ducha fría.

Nunca hasta ahora, había tenido un sueño húmedo.

Y para aterrarlo más, había sido con la sombra imaginaria que creó.

Eso se estaba volviendo algo extraño ya...

Salió de la ducha, más despierto y aseado, completamente desnudo y con el cabello un poco húmedo.

Se dirigió a su armario y sacó su uniforme deportivo.

Hoy hacía buen tiempo, así que también alistaría sus shorts por si le daba más calor a la hora de jugar.

Terminó de vestirse, retocándose el pelo un poco y se dirigió a la cocina en el primer piso, viendo a sus padres y a sus 4 hermanas.

-Buenos días, omma, appa, Sooyoung noona, Fei noona, Amber noona, Ailee noona- saludó a cada miembro de su familia en la mesa -Jiji ah- recibió un maullido del minino que estaba recostado en el regazo de Fei -Yoyo- otro maullido proveniente del gato que estaba por las piernas de su padre -Taepung- un fuerte ladrido se hizo escuchar, mientras Ailee aún acaricia las orejas del perro

-Buenos días, Joongie~~~- respondieron en perfecto coro las 4 hermanas

-Buenos días, hijo- saludó su padre levantando su vista de la taza de té que sostenía

-Buenos días, bebé. ¿Cómo amaneciste? No te oyes muy bien, y eso que es viernes- lo saludó su madre con un beso en la mejilla -Siéntate, omma hizo bibimbap para desayunar y también preparé un poco de kimchi extra picante para que la lleves a la escuela. Termina de desayunar y no te olvides de guardarla en tu mochila-

-Gracias, omma-

Así eran sus desayunos de lunes a viernes, los sábados y domingos, el horario varía. Ya sea porque se despertó a tiempo y pudo comer con sus padres antes de que ellos fueran a trabajar o que tal vez se quedó dormido y tiene su desayuno-almuerzo.

-Ya me tengo que ir, omma- anunció Fei -Hoy llegaré a la hora de cenar-

-¿No tendrás tus lecciones de cocina gourmet en la facultad?- preguntó su madre

-Por este semestre, los horarios andan un poco volátiles, así que habrán días en los cuales llegue temprano a casa- dijo terminando de meter algunas frutas en una bolsita dentro de su mochila

-¡Oh! Yo hoy llegaré también a la hora de almorzar- comentó Ailee -Los de la facultad me dijeron que los viernes no era muy necesario que me quede a dar clases de canto a los nuevos. Yo llegaré cada viernes a la hora de cenar-

-Yo aún tengo mi horario normal, pero tengo un pequeño espacio luego del almuerzo, lástima que no pueda modificar mi horario. No recuerdo por qué elegí la carrera de marketing- se lamentó Sooyoung también alistando sus cosas de la universidad

-No se quejen tanto que les saldrán arrugas- les renegó Amber -Omma, hoy llego a la misma hora que Jaejoongie. El edificio de mi facultad lo están arreglando y no nos dejarán entrar a las salas de sonido ni de audiovisuales por un largo tiempo-

-Aigoo~~~ mis princesas~ ya son todas unas señoritas- dramatizó la mujer mayor -Ya tengo una doctora con dos hijos, una ingeniera civil con una niña, una maestra de universidad a punto de casarse, mi ginecóloga solterona y a una dueña de boutiques de moda que tampoco se quiere casar aún- se refería a sus hijas: Taeyeon, Tiffany, Victoria, Eunjung y Jessica, en ese orden -y pronto tendré a mi futura chef, cantante profesional, publicista e ingeniera en sonido. Aigo~~ omma ya se hace vieja muy rápido-

-Omma, no te olvides de Joongie. Recuerda que él quiere ser dueño de un supermercado- bromeó Amber causando que todos en la cocina estallaran en risas, menos el mencionado

-¡Yah! Eso no es gracioso- formó un puchero -Es culpa de las noonas por preguntar cuando ellas estaban en la secundaria mientras yo tenía 3 años- se cruzó de brazos aun formando el puchero y frunciendo las cejas

-Joongie, no te pongas así- lo calmó Fei -Pero recuerdo que como tu familia, te seguiremos apoyando- y eso causó que la familia volviera a reír

-Appa~~- lloriqueó el pelinegro -Ya vámonos, por favor- miró a su padre con ojos de borrego

-Ok ok, está bien. Si todas están listas, vayamos al auto- con esa orden, tosas las mujeres de la casa, y Jaejoong, se dirigieron a la puerta principal para dirigirse a la camioneta para 15 personas que tenía la familia Kim

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-Adiós, Joongie~~~~~~- se despidieron a unísono, todas las mujeres de la camioneta, causando que más de una cabeza voltee a ver a todas las bellezas que iban en el vehículo el cual había dejado al pelinegro frente a la entrada de la escuela

-Vaya...- silbó Yoochun al llegar a su lado -Yo con unas hermanas así, sería muy feliz. En especial por estas despedidas-

-Ya cállate, Yoochun ah- le aventó su bolso de gimnasia en la cara y se adentró en la escuela para empezar con el horario.

Solo debía aguantar hasta que fueran las dos últimas horas de clase para poder tener su preciada hora de educación física.