Una Ducha que Recordar

Era una calurosa noche en Julio, en el gimnasio Hard Muscle, y el joven Jaejoong Kim estaba justo terminando de entrenar…

Crujido, tras crujido, tras crujido… Jaejoong siente el fuego que sus firmes abdominales mientras completa sus doscientos abdominales. Cada músculo en su bien formado cuerpo pulsaba por la terminación del entrenamiento.

-Gasp… He terminado- dijo Jaejoong para sí mismo.

Jaejoong miró a su reloj para verificar la hora. Se lee “1:37 am”.

-Mierda, creo que entrené más de lo que había pensado-

Giró su cabeza para revisar el salón. Está vacío.

-Todos se fueron… Mejor me voy, es tarde- se dijo.

Con una sacudida única, Jaejoong se levantó del piso acolchado y se dirigió al sótano, a las duchas.

-Geez, ¿dónde están todos? Nunca vi este lugar tan vacío antes- dijo para él mismo.

Caminó escaleras abajo y entró al largo corredor, con las duchas bien lejos, al final del corredor. El camino es oscuro y silencioso. De repente, una silueta aparece a la distancia.

Es el señor Kwon, el dueño del gimnasio.

-¡Hola señor Kwon!- saludó Jaejoong.

-Hola Jaejoong. Me alegra verte- respondió el saludo el señor Kwon.

-Espero no ser la última persona aquí. Perdí la noción del tiempo- explicó Jaejoong.

-No te preocupes de eso. Yunho, mi asistente está lavando las duchas ahora mismo. Él cerrará el local después de que tú te vayas- dijo el señor Kwon.

-Ok, gracias. Tenga una buena noche señor-

-Tú también…-

Ambos intercambiaron gestos amistosos y se fueron en direcciones opuestas.

Jaejoong entró al cambiador para hombres. Es un largo cuarto con filas de casilleros y percheros. El cuarto es oscuro, excepto por la oscura luz en las paredes.

-Mierda, ellos apagaron todas las luces principales. Nota mental, chequea el tiempo en el futuro- se dijo.

El aire es cálido y húmedo desde el área de las duchas al final del cuarto.

Jaejoong se dirigió hasta su casillero. A medida que pasa cada fila, busca alguna señal de Yunho, el asistente del señor Kwon. Nadie a la vista.

-Es probable que él aún esté en las duchas-

#9095. Con un giro de la cerradura, abrió la puerta. Huele a sudor viejo.

-Nota mental, lavar mis shorts-

Sonríe.

-necesito una ducha, estoy sudoroso como un perro-

Se quitó sus zapatos y sus medias, y luego su tanque empapado en sudor por el entrenamiento a su torso musculoso. Su cuerpo brilla bajo la luz de la pared, revelando las definidas figuras de un atleta entrenado. Se volteó hacia un espejo y se quedó parado en frente de este, ante su reflejo.

-Estoy jodidamente bueno-

Flexiono sus trabajados brazos, pectorales grandes y sus firmes músculos de la espalda en frente del espejo, impresionándose por su propia musculatura. Luego se bajó los pantalones. Sus ajustados bóxers están húmedos por el sudor, aferrándose a la pequeña protuberancia que se encuentra debajo de su miembro flácido. Él hace una mueca a su saludable dotación. Poco a poco, se quita los bóxers, dejando al descubierto su impresionante miembro.

Miró a su alrededor, pero aún no habían señales de Yunho. Se acarició el miembro un par de veces.

-Necesito un buen polvo… pero primero, una ducha-

Totalmente desnudo, Jaejoong agarró una toalla y jabón, y se dirigió al área de las duchas, al final de la habitación. La corriente de las duchas es espera y llena el aire. El sonido del agua que cae se escucha a la distancia.

Mientras Jaejoong se acerca más, ve un cuerpo a la distancia.

-Debe ser Yunho-

Camina más de cerca. Sus ojos están templados del cuerpo que tiene en frente. Con cada paso, Jaejoong tiene una mejor visión de la alta figura de Yunho. Cerca, más cerca… el rostro de Yunho mira hacia la pared y a la ducha, el flujo de agua y espuma por su larga espalda y su trasero. 

Cerca… Jaejoong se sorprende por el perfecto cuerpo de Yunho.

-Él está en buena forma-

De repente, la cabeza de Yunho gira ligeramente, escuchando los pasos de Jaejoong acercándose.

-Hola. Tú debes ser Yunho-

Silencio.

-Si…- responde Yunho.

-Perdón, soy el último en salir. Perdí la noción del tiempo-

-No hay problema-

Jaejoong caminó más cerca para tener una mejor visión de la cara de Yunho. Y lo reconoce.

-Te he visto aquí mucho, pero nunca supe que eras el asistente del señor Kwon-

Silencio.

-Si…-

-Genial-

Jaejoong dejó su toalla sobre un estante y coge la llave de la ducha, a pocos metros a la izquierda 

de Yunho. Chillido. La ducha libera un chorro de agua caliente. Mandando una agradable y cálida sensación a través de su cuerpo.

-Uhh… Necesitaba esto…-

Con su jabón, Jaejoong comienza a enjabonarse sus adoloridos músculos. Primero el pecho, y luego los brazos.

Todavía intrigado por el buen físico de Yunho, él vira sus ojos levemente hacia la dirección en la que estaba el moreno. Su mirada comienza por el masculino pecho del alto. Está lo suficientemente cerca para ver el vello que se junta sin problema en el centro de sus pectorales. Los hombros y brazos de Yunho se ven fuertes. Sus ojos viajaron más abajo a los músculos definidos del estómago. 

Perfecto en todos los sentidos. Sigue bajando, ahora a su pelvis. Su pelo púbico es oscuro, pero bien recortados. Ahora su masivo miembro.

-Puta madre, él es más largo que yo. Este chico es irreal-

Jaejoong mantiene la mirada fija en el miembro enorme de Yunho.

Silencio.

-¿Te gusta lo que ves?- pregunta Yunho.

De repente los ojos de Jaejoong se enfocan y levanta el rostro, hacia le de Yunho con vergüenza.

-Lo siento… Quiero decir, yo no quería… quiero decir, no estaba mirando…- habló con un claro 

sonrojo.

-Está bien. Me gusta cuando la gente me observa-

Silencio.

-Oh-

Silencio.

-Debo decir que tienes un buen físico- sonrió Jaejoong.

-Gracias… trato de mantenerme en forma- sonrió de vuelta Yunho.

Silencio.

-Así que, ¿qué esperas?- preguntó Yunho.

-¿Perdón?-

-Yo sé que tú quieres…-

-Perdón, no entiendo a lo que te estás refiriendo- interrumpe Jaejoong con un fuerte sonrojo en el rostro.

-Tu pene está duro-

Con vergüenza, Jaejoong miró hacia abajo, hacia su erecto pene.

-Mierda…-

-No te preocupes, no estoy ofendido- sonrió Yunho.

Silencio.

-Me gusta a decir verdad-

Silencio.

-Yo nunca…- empezó a hablar Jaejoong.

-No te preocupes, lo haré suave y lento- sonrió.

-Pero, y si…-

-Estamos solos ¿recuerdas? Relájate…-

Yunho tiró su jabón y se acercó un par de pasos a Jaejoong. Se arrodilló en frente del miembro de 

Jaejoong y empezó a chupar la punta.

-Ohhhh…- gimió Jaejoong.

La lengua de Yunho se paseó a lo largo del miembro del bajo y tocó sus cálidos testículos. Sus testículos entraron en la boca de Yunho, mandándole una oleada de éxtasis a través de todo su cuerpo. La mano derecha de Yunho se mantiene masajeando el trasero del otro, y luego usa sus dedos, para probarlo por dentro. Él acaricia su pene con la otra mano, ya completamente erecto y de pie como una estatua.

-Uhhhh…-

Profundo, más profundo, Yunho toma el caliente miembro de Jaejoong en su boca, probando el pre semen. Masajeando de arriba abajo rápidamente, y también lentamente. Sus dedos prueban más profundo, penetrando el interior de Jaejoong.

-Vamos… no te detengas…-

Los músculos de Yunho pulsan a la vez que él mueve la cabeza en todas direcciones. Arriba, abajo, izquierda y derecha. La mano de Jaejoong explora el musculoso cuerpo de Yunho. Recorriendo su mano hacia debajo de la espalda del moreno mientras disfruta del placer oral que recibe.

-Oh si… me vengo… me vengo…-

Jaejoong dispara un gran chorro de semen en la boca hambrienta del alto. Yunho continúa chupando, tragando cualquier rastro de semen. El más bajo suspira por la sensación por el orgasmo.

Yunho se levanta del piso de mosaicos. Jaejoong intenta regularizar su respiración.

-Ahora me toca a mí- sonrió Yunho –Te quiero en cuatro-

Dejándose llevar por el momento, Jaejoong obedece cada palabra de Yunho. Él se arrodilla con sus manos sobre el suelo. Levanta su firme trasero.

-Tómame…-

Yunho sonríe y lentamente empieza a penetrar la estrecha entrada de Jaejoong.

-Ohhh…- gime el rubio.

-Si… eres tan estrecho-

Profundo y más profundo. Más y más. El enorme miembro de Yunho recorre todos los rincones. 

Jaejoong siente la fuerza de su gran miembro y jadea de excitación. Los minutos pasan, pero ellos los sienten como segundos.

-Fuerte… ¡más fuerte!-

El moreno empuja más profundo, consiguiendo que su miembro se hunda más profundo en el estrecho ano del más pequeño. Los dedos de Yunho masajean el pecho del rubio, su miembro y sus testículos.

-Ohhh… me vengo…- gime Yunho.

Repentinamente, Yunho lanza un largo chorro de semen caliente.

-Ohhhh si…-

Su interior se llena de una sensación cálida.

El moreno continúa empujando su miembro… sigue con dificultad. Jaejoong se sorprende por la fuerza de su miembro. De repente, un segundo estallido de chorros de semen salen de su miembro. 

Comienza a gotear hasta llegar al miembro de Yunho y finalmente saca su miembro. El rubio se emociona de ver el húmedo miembro del moreno y se la comienza a chupar.

-Oh si… eso es-

Jaejoong lame profundamente, tomando el miembro entero dele alto en la boca. Le lame el semen de su miembro y juega con sus testículos.

-Todavía sigue duro- dice Yunho.

Jaejoong lo mira y sonríe.

-Quiero más-

-Entonces dámelo-

Yunho levanta su estrecho trasero en dirección a Jaejoong y el rubio entra en él. Envuelve sus brazos alrededor del moreno, la sensación placentera de todos sus músculos tonificados. Dentro y fuera empieza a meter su hinchado miembro. El más bajo empieza a explorar la parte posterior del cuello del otro con su lengua.

Rápidamente, Jaejoong se viene en el estrecho trasero del moreno.

-Eso es…-

Jaejoong saca su miembro… aún palpitante por el orgasmo.

-Lámelo-

Yunho gustoso acepta la oferta, chupando cada resto de semen que haya quedado sobre su miembro. Luego sigue haciendo su camino hasta los abdominales del rubio, su pecho, hasta el cuello. Se besan… intercambiando sus salivas… acariciándose con sus lenguas…

-Eres muy bueno…- dijo el rubio.

-mmmm… lo disfruté también. ¿Te gustaría ir a mi departamento… ummm…?-

-Soy Jaejoong… Me encantaría Yunho, pero debo irme a casa ahora-

Silencio.

-¿Qué te parece mañana?- preguntó Jaejoong.

-Te voy a follar tan jodidamente delicioso- sonrió Yunho.

-No puedo esperar-

Intercambiaron un último beso y partieron hasta su próximo encuentro.

FIN.